Nerea Garmendia: “Mi rutina es no tener rutina”

Nerea Garmendia: “Mi rutina es no tener rutina”

Cuando me propusieron hacer un reportaje con esta actriz y jugar, por un día, a ser la imagen de su nueva línea de ropa, ni me lo pensé. Todo lo relacionado con Nerea Garmendia inspira buen rollo, alegría y es garantía de que vas pasar un rato muy agradable. Así que sabía que el margen de error a la hora de sumergirme en este proyecto iba a ser mínimo, si es que cabía dicho margen. Y fue así como pasé una de las aventuras más bonitas que he vivido en AlgoPasaCom…, llena de risas, cariño y algo de surrealismo, al ver a la gente que se lanzaba a los burros de ropa dispuesta a comprar cuando nos trasladábamos por la calle (Y juro por Coko, la mascota de Nerea, que esto es verídico…)

Ángel Caballero: Ser actriz, colaboradora en programas, diseñar tu propia línea de ropa… ¿Soñabas con este tipo de cosas cuando eras una niña?

Nerea Garmendia: Jamás he soñado con diseñar ropa. Sí que he sido más de escribir, porque escribía para mí en un diario desde los ocho años. Así que cuando me ofrecieron la oportunidad de escribir un blog, lo acepté con muchas ganas, aunque tuve que aprender a hacer un poco de filtro entre lo que escribo para mí, que es a lo que estaba acostumbrada, y lo que quiero que sepan los demás. Si creo en algo, o en alguien, necesito probar, rápidamente, si es para mí o no, para sacármelo corriendo de la cabeza. Si no valgo para hacer algo o, por lo que sea, no funciona… ¿Para qué voy a invertir más energía en eso, si luego no va a tener ningún futuro? Esto me ha ocurrido siempre, tanto en una relación, ya sea de pareja o de amistad, como en el trabajo. Y es justo lo que me ha sucedido ahora con la moda. Dije: “Esto parece que me gusta mucho… ¡Pues vamos a probar!” Y, claro, la sorpresa fue la maravillosísima respuesta.

A.C: En nuestra profesión, desgraciadamente, parece que no está demasiado bien visto que te dediques a otra cosa que no tenga que ver con actuar. ¿Has valorado esto a la hora de embarcarte en este nuevo proyecto?

N.G: Qué interesante es esta pregunta… A mí no me preocupa en absoluto, porque creo que cuantas más cosas hagas, más crecerás como persona y por eso lo hago. Estoy segura de que alguien pensara eso de mí, al igual que se puede preguntar: “¿Si eres actor, por qué no actúas?” Lo que ocurre es que nosotros sabemos que siendo actor puedes estar tres meses sin currar, cinco años o hasta que te toque. Yo, por ejemplo, tenía una película para junio y se ha pospuesto unos meses. ¿Qué voy a hacer? ¿Parar? Yo, como actriz, necesito tener la mente ocupada para ir creciendo, siempre dentro de lo que engloba nuestra profesión: la creatividad, aprender a expresarte, a relajarte, a actuar… Al final, si tú te quedas en tu casa esperando a que suene el teléfono, no vas a tener la misma energía si estás en el sofá desesperado que si la llamada te pilla moviéndote, haciendo cosas y sintiéndote útil, porque sabes que vales para otras cosas. A veces, la presión, las ganas o la necesidad, hacen que transmitas una desesperación que puede dañar a tu trabajo como actor en una prueba. Yo, por eso, necesito estar siempre activa, ya sea leyendo un libro o sacando una línea de ropa.

 

A.C: ¿Alguna vez has hecho una prueba para un personaje que ha acabado en manos de otra actriz, que, además, es amiga?

N.G: Sí. Pero eso es algo normal, porque en la profesión, al final, siempre tienes un mismo perfil de competencia. Yo casi siempre opto al mismo tipo de perfil de personaje, e imagino que eso mismo les sucede a otras compañeras. Así que, al final, siempre nos encontramos las mismas en los castings (Risas). Nos conocemos, somos amigas y compañeras… Siempre quieres llevártelo tú, pero si no es así y acaba siendo para tu compañera, a la que adoras… Es una putada, pero no sabe mal.

A.C: En la serie 90 60 90, diario de una adolescente te tocó trabajar con tu pareja, Jesús Olmedo. No suele ser fácil mezclar relaciones de pareja y trabajo…

N.G: Lo que pasó en esta serie fue curioso, porque nosotros nos conocimos poco tiempo antes en una fiesta de aniversario del Club Palestra. Yo nunca había salido con un actor y admiro mucho a Jesús, así que yo decía: “Ay, dios mio… ¿Cómo será esto?” Decidimos no decir a nadie del equipo que éramos pareja y en aquel momento tampoco lo sabía mucha gente, por lo que empezamos a trabajar con este rollo que nos obligaba a cambiar el chip cuando llegábamos a grabar. Estuvimos jugando un tiempo a eso y fue maravilloso, porque, de repente, estaba trabajando con un compañero más del que aprendí una barbaridad, porque él es muy generoso. Muchas veces no es sólo el trabajo que ve el espectador, sino el que hay detrás… y se agradece mucho cuando te encuentras a alguien que está siempre dispuesto a ayudarte.

 

 

 

A.C: Tener a otro actor en casa, en el que además confías, también tiene sus ventajas: desde ayudarte con una prueba a pasarte el texto cuando tienes que estudiar un guión.

N.G: Sí, pero nosotros no lo hacemos. A mí me cuesta hacer esas cosas, porque, ahora que no nos oye, me impone un poco (Risas).

A.C: ¿En qué tipo de personaje te gustaría verte en un futuro?

N.G: En algo de acción. Me gustaría hacer un personaje que sienta, que tenga su corazoncito, su lado humano… porque la mayoría de personajes que he hecho, aunque también me gustan mucho, han sido de mala, o de mujeres fuertes y duras. No me quejo, pero sí que echo de menos cambiar un poco de registro.

A.C: Como actriz, has apoyado muchas causas benéficas e, incluso, también lo has hecho con tu línea de ropa.

N.G: Hay muchísima gente que necesita ayuda y yo creo que, siempre que podamos aportar nuestro granito de arena, es importarte colaborar en este tipo de causas. Aunque sea por un motivo egoísta, por sentirnos mejor con nosotros mismos, pero lo importarte es hacerlo. Muchas veces sólo basta con mandar una foto, un video o ir a evento. Son acciones muy pequeñas, que, casi, no nos cuestan nada y pueden ayudar a que la causa que estás apoyando tenga un poco más de difusión. Además, mi jefa de prensa, que es una persona muy solidaria, organiza muchos eventos de este tipo y yo siempre intento ir y apoyar en todo lo que pueda. Jesús y yo conocimos hace un par de años, de primera mano, un caso de una niña que tenía una enfermedad muy rara, y que la obligaba alimentarse por sonda, no podía caminar, no podía hablar, ni expresar sentimientos si le dolía algo. Aquello fue muy duro y cuando ves algo así tan de cerca, es inevitable que provoque algo en ti y que acabes pensando en lo afortunado que eres sólo por levantarte por la mañana y estar sano.

 

 

 

A.C: ¿Cómo surge la idea de crear tu propia línea de ropa?

N.G: Llega un momento en la vida en el que el cuerpo te pide hacer ciertas cosas. Llevo desde los dieciséis años trabajando como actriz y ya sabes que, en ocasiones, esta profesión va un poco ligada a la de la moda, porque acabas vistiéndote para ir a un evento y pasar por un photocall o para utilizar la ropa que llevaría tu personaje en algún trabajo. También tiene que ver que hace un año comencé con el blog (Quédate con Nerea, en la revista SEMANA). En él, hablo de mis proyectos, aficiones, la ropa que me gusta… Y las lectoras me preguntaban por la ropa que sacaba en él y dónde podían encontrarla. Por otro lado, a mí siempre me han gustado los juegos de palabras… Así que he mezclado todo esto y lo he volcado en una prenda. Al fin y al cabo, la ropa es lo que nos define: lo que nos gusta, lo que nos hace sentirnos de una determinada manera, el estado de ánimo con el que nos hemos levantado ese día… Es como una segunda piel. Hace un año hice una pequeña colaboración con otras artistas, como Chenoa, Noelia López, Angy…, y sacamos unas prendas, cinco diseños cada una, para un fin benéfico. Se ve que me picó el gusanillo y empecé a querer sacar más ropa, también para chicos, para niños… Que toda la familia pudiera vestir de By Nerea, que es como he llamado a la marca, y, sobre todo, a precios asequibles, porque me parece fundamental que la calidad y el precio estén al alcance de cualquiera.

A.C: Se te ve muy lanzada…

N.G: Hasta estoy pensando en sacar ropa para mi perro, Coko. No te digo más… (Risas)

A.C: Es lo menos que podrías hacer por él, teniendo en cuenta que es la imagen de la firma. Y después de lo bien que se ha portado en la sesión de fotos que hemos hecho para este reportaje…

N.G: Sí, nos gustó la idea de que fuera la imagen de la firma porque él representa la nobleza, te entrega su amor sin condiciones, te cuida y siempre está ahí, pase lo que pase. No te pide nada y te lo ofrece todo… y yo quería que algo así representara mi marca. Como actores que somos, siempre buscamos el por qué a cada cosa que hacemos, sobre todo cuando nos enfrentamos a un personaje nuevo. Por eso no es casual que Coko sea la imagen o que cada diseño lleve un mensaje o simbolice algo. En By Nerea tratamos con gente de la calle, con gente real, y por eso, para nosotros, es muy importante la cercanía. Cada prenda lleva un mensaje para que cada persona elija el que crea que se adapta más a su estilo, porque queremos que todo el mundo se sienta identificado. También tengo que decir que aunque te hable de By Nerea como algo mío, yo no estoy sola en esto. Detrás hay todo un equipo de gente que me ayuda, empezando por mi chico, Jesús, que siempre es el primero que me ha apoyado desde que esto era solo una simple idea.

 

A.C: Sabes que yo soy muy fan de la marca y las veces que me he puesto mi camiseta de By Nerea con el mensaje “Soy el hombre de tu vida, aunque todavía no lo sepas”, ha causado autentica sensación.

N.G: Pues, precisamente, esa camiseta surgió del día que hicimos el desfile de presentación de By Nerea, al que vinieron muchos amigos. Cuando acabó todo y yo estaba dando las gracias en el escenario, pensé que igual esa gente también tenía algo que decir. Así que dije: “Si alguno tiene algún mensaje que quiera transmitirnos, por favor, apuntadlo en esta hoja que os van a pasar”… Y Jordi Rebellón puso esa frase que me encantó y la hemos plasmado en esa camiseta. Nos gustó tanto esta iniciativa que en las tiendas hemos pedido que cada cliente nos deje su propuesta. Las vamos a leer todas y en la próxima temporada sacaremos una camiseta con la frase que más nos guste.

A.C: Ya te enviaré yo también la mía… Para crear esta línea de ropa, desde la idea hasta la manufacturación del producto, ¿Te has inspirado en alguna época en concreto o en diseñadores a los que admirases?

N.G: No. Evidentemente, estás al día de las tendencias, los colores o los patronajes que se llevan, pero no estamos inspirándonos en ningún diseñador en concreto o época. Nosotros somos muy del Carpe Diem, así me siento y así te lo transmito. Nos gusta vivir el momento, como ahora que estamos haciendo la sesión de fotos con Coko en la chistera y de ahí se me ha ocurrido la idea para un diseño.

A.C: ¿En algún momento te has sentido juzgada por otros diseñadores, que puedan llevar una carrera más dilatada dentro del mundo de la moda?

N.G: No me ha ocurrido algo así, pero la verdad es que sería muy lícito. Yo no soy diseñadora… Lo mío surgió de una forma más casual y sin ninguna pretensión, pero entendería que viniera alguien que me pudiera criticar, porque yo no he estudiado diseño, sólo me dejo llevar lo que siento. De momento, tanto la gente de la profesión, como diseñadores o la prensa, nos están tratando estupendamente. Estamos encantados, porque tenemos ya doce puntos de venta, vemos que esto sigue creciendo y estoy feliz. Te confieso que yo estaba más preparada para recibir críticas que para que todo fuera tan de color de rosa.

 

 

A.C: Tal y como está el panorama actual, ¿Crees que los artistas estamos obligados a reinventarnos?

N.G: Creo que sí, aunque esa no ha sido mi finalidad. Yo siempre he sido un culo inquieto y necesito que no haya un solo día de rutina en mi vida, porque mi rutina es no tener rutina. La gente me dice: “eres polifacética”. Y no, es que necesito alimentarme de experiencias para nutrirme a mí misma.

A.C: Quizá fue eso lo que te llevó a participar en Splash! Famosos al agua… En un reality de estas características, inevitablemente, acabas mostrando una faceta más personal. ¿En algún momento sentiste un poco de pudor al dar a conocer esta parcela más desconocida de ti?

N.G: No te voy a engañar, me lo pensé mucho antes de entrar en el programa. Nunca antes me había prestado a concursar en un reality, pero era un producto que estaba muy cuidado, me informé de quienes eran los compañeros que participaban, vi al equipo con el que iba a trabajar y, sobre todo, siempre tuve clarísimo hasta dónde iba a exponerme. Yo sabía qué límites nunca iba a cruzar. Decidí concursar porque era algo diferente, porque creo que es también una forma de superación y porque pensaba que podía ser una experiencia productiva. Claro que tuve miedo de que pudiera ser algo contraproducente para mi carrera, pero, por lo que me han trasmitido los compañeros, creo que fue algo positivo.

A.C: ¿Da más vértigo saltar desde diez metros de altura en un trampolín o enfrentarte a un nuevo personaje?

N.G: Saltar del trampolín (Risas). Aunque también es verdad que depende del personaje. Si te ofrecen hacer el papel de tu vida, lógicamente, da vértigo. Depende del proyecto, de cuán preparado te encuentres para abordar ese personaje… Pero yo soy de las que dicen: “Vivan los vértigos”. Creo que necesitamos adrenalina…

A.C: Otra cosa no será, pero tú adrenalina tienes… y, además, recuerdo que en la función de teatro Tres la gestionabas muy bien y a tu personaje le venía de maravilla.

N.G: Muchas gracias. Me encanta que me digas esto, porque para mí el personaje de Carlota Cordero es uno de los más bonitos que he hecho. Me enamoré de ese papel en cuanto lo leí. Y de la función. Además, Juan Carlos Rubio escribe de una forma magistral. No quería cambiar ni una sola coma de su texto, porque era una maravilla. Y me encantaba cómo soltaba cada frase a machete, porque yo también soy un poco así y me gusta la gente que suelta las cosas como las siente, sin maquillarlas. Aquello fue una verdadera gozada.

 

A.C: Por último, me gustaría preguntarte por esa película que has mencionado antes y que vas a rodar en breve.

N.G: Es una comedia que se titula Todas las palabras del mundo. Interpreto a un personaje que me ha enamorado, casi, tanto como el que hice en Tres. Tengo una trama preciosa con Luis Cao, que es una historia de amor un poco surrealista, pero que a todos nos ha ocurrido alguna vez. También está Miguel Hermoso en el reparto y, por ahora, poco más te puedo adelantar. También hay algo más por ahí, pero de eso sí que no te puedo decir nada todavía. Estoy muy feliz y con muchas ganas de empezar.

A.C: A mí me encanta verte así. Te deseo mucha suerte y mil gracias por esa energía tan optimista y de buen rollo que vas dejando a tu paso. Ha sido un verdadero placer, Nerea.

 

TEXTO: ÁNGEL CABALLERO

FOTOGRAFÍA: CARLOS DAFONTE

AYUDANTE DE FOTOGRAFÍA: PILAR DE MIGUEL

MAQUILLAJE Y PELUQUERÍA: PAULA CALZADA

VESTUARIO: BY NEREA GARMENDIA (www.nereagarmendia.es)

AGRADECIMIENTOS: PEDRO MATEO, LAURA PIÑANA

 

¡NO TE PIERDAS el próximo JUEVES 27 DE NOVIEMBRE AlgoPasaCom… RAÚL MÉRIDA!